Para prolongar la vida útil de una aguja, es fundamental limpiarla minuciosamente antes de guardarla. Es mucho más fácil eliminar los contaminantes antes de que se sequen y endurezcan. Asegúrese de enjuagar la aguja con un disolvente conocido por solubilizar la muestra. Un error común es eliminar sales, proteínas o ADN con disolventes orgánicos. Esto tiende a precipitar los contaminantes, lo que provoca obstrucciones en lugar de prevenirlas. El kit de limpieza de agujas de Hamilton incluye una solución de limpieza concentrada biodegradable sin fosfatos que es adecuada para muchos tipos de muestras comunes y alambres de limpieza de tungsteno de varios tamaños que se pueden pasar a través de la aguja para eliminar una obstrucción.